Las heces caninas contribuyen a la contaminación ambiental

Las heces que nuestros perros depositan en zonas públicas tienen consecuencias muy negativas y son un importante generador de contaminación ambiental.

La materia fecal de las mascotas, olvidada en las calles por los propietarios, tiene consecuencias que abarcan diferentes áreas:

➢ Contaminación visual: las heces en las calles propician un entorno desagradable, generan un aspecto descuidado y de poca higiene.

➢ Contaminación olfativa: el fétido olor de los excrementos es desagradable y molesto.

➢ La materia fecal es fuente de contagio de enfermedades propias de los perros, de tipo viral (parvovirosis) y parasitario (ascaridiasis, anquilostomiasis, etc.).

➢ Pueden ser fuente de contagio de enfermedades para las personas, ya que pueden transmitir algunas formas de zoonosis.

➢ La materia fecal puede contaminar el agua de estanques o mantos acuíferos.

➢ Pisar las heces puede propiciar accidentes como resbalones o caídas.

La solución a este problema es fácil, educar e informar es la clave para que disminuya significativamente este gran problema social que nos afecta a todos, aquí algunas soluciones fáciles, rápidas y que no nos generan mucho esfuerzo.

· Si vas a sacar a tu mascota a pasear, asegúrate de llevar algún aditamento para recoger sus heces. Puedes emplear algún recogedor o una bolsa, en tiendas de mascotas encontrarás una amplia variedad de productos para este fin.
· Si vez a personas dejando desechos de sus mascotas en la calle, invítalos amablemente a recogerlas, si no tiene bolsa y puedes ayudar, proporciona una.

Recuerda que pequeñas atribuciones hacen grandes cambios, el cambio está en nosotros mismos, aportar un poco a la sociedad es tarea de todos, cambiar los índices de contaminación es un gran paso para erradicar con el problema de heces en las calles y por lo tanto disminuir los problemas de salud.