Existen varias dudas respecto al baño del perro, sin embargo, la respuesta está en las necesidades del perro y de los hábitos de su dueño, es decir, los cuidados que le brinde, los cuales se espera siempre sean los mejores.
Respecto a las necesidades del perro, a menos que tenga un problema de la piel, no hay ninguna necesidad de seguir un calendario específico para el baño. Cabe señalar que no porque el perro no necesite de un seguimiento específico en cuanto al baño, debe descuidarse su aseo. Lo recomendable es que el perro reciba un baño no más de un vez a la semana y al menos una vez al mes.
Por otro lado, siendo el dueño del perro el encargado de su cuidado, aquí influye mucho su personalidad y hábitos para decidir la frecuencia con la que bañará al perro. Si hablamos de una persona para quien la limpieza es primordial, tratará de dar un baño con mayor frecuencia, a diferencia de una persona que es consciente de la necesidad del aseo pero no es lo más importante en su vida diaria, proporcionará un baño con menor frecuencia.
A pesar de que la decisión del baño reside en el dueño, a excepción de un algún problema en la piel. Es importante resaltar que el tema del baño no es del todo una decisión arbitraria, pues si se desea que el perro tenga una vida saludable, es recomendable pedir la orientación de un veterinario, para así conocer las necesidades de nuestro perro, respecto a los cuidados que necesita su piel y pelaje.
Algunos factores a considerar para la salud del perro:
Finalmente, para determinar la frecuencia del baño influyen dos factores: la decisión del dueño, y las necesidades del perro, esto depende de la raza, alimentación y estilo de vida.
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